Una buena forma de dar lo mejor de ti es que no te dejes llevar por la inercia y la rutina de tener que trabajar porque sí, porque tienes que hacer las cosas.
Hazte una serie de preguntas al comenzar cada mañana que te ayuden y motiven a dar lo mejor que tienes dentro: ¿Qué piensas momentos antes de hacer una tarea o al planificar tu jornada?, ¿Cómo te motivas para ponerte con ellas?, ¿Las haces porque sí o porque toca?, ¿Te ayudan a lograr aquello que quieres?
Cada día es una oportunidad única para hacer las cosas mejor, dar un paso más hacia tu éxito personal y profesional, y aprovechar todo lo bueno que eres y tienes.
En ocasiones, despreciamos lo bueno que ya somos y hacemos porque no valoramos de una forma correcta todos nuestros talentos, innatos o aprendidos, y el saber hacer que nos caracteriza.
Cada mañana, cuando comienzas tus tareas diarias, se consciente de la gran cantidad de energía, de motivación, de creatividad, de inspiración, de pasión, de ilusión, de optimismo, y muchas cosas más que posees, que te llevan a realizar de forma correcta aquello que debes hacer.
No comiences cada mañana de forma rutinaria tus quehaceres y reflexiona sobre para qué y por qué haces las cosas, de qué forma te ayudan a lograr: tus objetivos, tus metas, aquello deseas y quieres para ti. Busca la excelencia, el hacer las cosas de forma brillante, el superarte cada día.
En un principio, esto te puede parecer algo pesado y costoso, pero si buscas el por qué haces eso cada día y de qué forma te ayuda a lograr tus objetivos, estarás enfocándote en el lugar a dónde llegar y el camino a recorrer para conseguir: tus metas, tus sueños, aquello que más quieres para ti.
No hagas las cosas porque sí y porque toca hacerlas, da un paso más y comienza a ver de qué forma, eso que vas a comenzar a realizar, te ayuda a tus logros personales y profesionales. Esto contribuirá a que seas más productivo, a que cada tarea que haces tenga un sentido y contribuirá a aumentar tu autoestima, tu capacidad de hacer las cosas, tu satisfacción, y por supuesto a tu crecimiento personal y profesional, además de apartar de ti la monotonía y el aburrimiento.
Para comenzar cada día dando lo mejor de ti, aleja de ti la monotonía y el hacer las cosas porque sí, busca siempre el por qué y para qué las haces, reconoce de qué forma te están ayudando esas tareas que realizas en tus logros personales y profesionales.
Cuando tienes un motivo para llevar a cabo aquello que tienes que realizar, encontrarás la forma de entrar en acción más fácilmente, con más energía, entusiasmo, ilusión y entrega, lo que sin duda te permitirá dar lo mejor de ti y realizar cosas que hasta ahora te parecían imposibles.
Algo sólo es imposible hasta que alguien lo duda y acaba probando lo contrario (Albert Einstein)
Un artículo de Lola García Gomez
No hay comentarios:
Publicar un comentario