viernes, 23 de febrero de 2018

Las mejores preguntas para romper el hielo en un evento de networking

Presentarte a un desconocido y empezar una conversación puede parecer difícil, sobre todo si eres una persona introvertida. Por ello hoy te traemos las mejores preguntas para romper el hielo en un evento de networking y evitar los silencios incomodos. La primera regla para triunfar en los eventos de networking es dejar la timidez en casa. Vas a tener que  presentarte a desconocidos y mantener una conversación, el objetivo es que hagas contactos no que te escondas en la esquina menos concurrida de la sala.
Eso si, si eres una persona introvertida acercarte a alguien nuevo puede ser todo un reto, pero es un reto que merece la pena afrontar. La clave está en saber cómo iniciar una conversación en un evento de networking; si la otra persona también está merodeando solo por la sala probablemente te lo agradecerá.
Por ello hoy te traemos las mejores preguntas para romper el hielo en un evento de networking. Así, tampoco entres en pánico si hay algún silencio incómodo, hay suficientes preguntas como para reanimar la conversación, ¡será por temas!
Ante todo, empieza presentándote. Un sencillo “Hola, yo soy X, ¿y tú?” es suficiente para empezar a establecer un vínculo con la otra persona. Después puedes proceder a hacer alguna de las siguientes preguntas:
  • ¿Eres de [la ciudad donde estéis], o viniste aquí por trabajo?: Esta pregunta es una buena opción para iniciar una conversación ya que te estás interesando directamente por la otra persona y su trayectoria, con un tono bastante relajado y cercano. Si sois de la misma ciudad tendréis tema de conversación para rato, y si vino por negocios puede dar pie a hablar sobre su profesión.
  • ¿Qué te motivó a venir a este evento?: Es una manera discreta de preguntar cuáles son los objetivos profesionales de la otra persona, puede que tengáis muchos en común.
  • Habla sobre la comida: Si hay comida en el evento estás de suerte. En vez de mirar la mesa de la comida en silencio aprovecha para hacerte algún amigo, es una manera muy casual de iniciar una conversación: ¿sabes qué lleva este plato? ¿has probado el hummus? ¿qué tal está?
  • O comenta sobre la bebida o la música: Al igual que puedes hablar sobre la buena pinta que tiene la comida, o lo bien que huele, también puedes hacerlo mismo con todo lo que te rodea. Escoge a la persona que tengas al lado y comenta lo buena que es la música en vivo que está sonando, o lo elaborados que son los cócteles. Mira a tu alrededor, fíjate en qué llama tu atención y compártelo.
  • ¿Qué te ha parecido la charla?: No es raro acudan oradores a hablar sobre temas profesionales antes de dar paso al evento de puro networking. Si este es el caso, acércate a alguien y pregúntale qué le ha parecido el orador o el tema de la charla.
  • ¿Es la primera vez que vienes a este evento? Me habían hablado muy bien sobre ello pero nunca había estado antes: Si es un evento que tiene lugar periódicamente, ya sea una vez a la semana, al mes o al año, puedes aprovechar para preguntarle a la otra persona si alguna vez había acudido. Si es su primera vez puedes preguntarles qué les motivó a venir, y si son asistentes habituales puedes pedirles algún consejo sobre qué actividades hacer.
  • Si te soy sincero, no conozco a nadie aquí y ando un poco perdido, ¿te importa si me uno?: Volvemos a repetirlo: no es raro acercarte a hablar con un desconocido en un evento de networking, para eso están. Acércate sin miedo.
  • Bonitos zapatos, ¿de dónde son?: Ficha una prenda que te guste, y halaga a la persona preguntándole dónde se los ha comprado. Es una buena manera de ganarte a la otra persona y arrancar una conversación relajada y agradable.
  • He oído que estabais hablando de…: Presta atención a la conversación de los que te rodean, y en cuanto escuches un tema que te interese únete haciendo algún comentario o pregunta, o simplemente preguntándoles si puedes unirte.
  • ¿Viste el partido de fútbol ayer/Has escuchado lo último sobre…?: Coge un tema de actualidad y coméntalo. Si no funciona tranquilo; pongamos que te dice que no le gusta el fútbol, puedes aprovechar para preguntarle cuáles son sus intereses o hobbies.

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